A los soldados venezolanos. Por: G/D (GN) Enrique Prieto Silva @Enriqueprietos

¡A los soldados venezolanos!

Enrique Prieto Silva

Jueves 29 de septiembre de 2016

La carta del doctor Felipe Pérez Martí dirigida a Nicolás Maduro, nos ha parecido una acertada decisión de profundo interés positivo, ajustada a lo que cualquier persona de buena fe haría, en un intento por tratar de ayudar a corregir el desastroso gobierno derivado del equivocado “socialismo del siglo xxi”, que es lo que tenemos que adosar al legado del “comandante supremo”; expresión que Pérez Martí asume ser su autor, en conversación que narra en documento dirigido “a los soldados venezolanos”, manifestando que, de estar con vida, Chávez no lo aceptaría, ya que junto a él, era también su subalterno. ¡Dios es el único comandante supremo!

Digiriendo ambos documentos, tenemos que reconocer la sinceridad del ex ministro de Planificación y Desarrollo de Chávez, quien al renunciar a su cargo, luego del paro petrolero, fue designado Jorge Giordani, quien tiene mucho de decir sobre el desastre económico en que cayó la “revolución”, y que hoy es la causa del caos, para cuya solución, el ex-ministro propone un cúmulo de medidas, que a las claras nos indican estar bien concebidas y mejor diseñadas. Le dice a Maduro: “…he estado impulsando, con un conjunto de compañeros, una propuesta económica y política para enfrentar los problemas de tu gobierno y de nuestro país, llamada ¡Qué Hacer!, para cambiar el curso de lo que veíamos claro, desde entonces, como una avanzada hacia el abismo, una de cuyas manifestaciones es lo que se aprecia en términos de nivel de pobreza estimada para el 2015, que fácilmente excederá el 50% de la población, un retroceso inmenso en materia social con respecto a lo que se había avanzado…”

Pérez Martí, doctor en economía de la universidad de Chicago, ha sido profesor del IESA y actualmente lidera el “Movimiento de Conexión Social”, cuyo objetivo es estimular un nuevo modelo social de desarrollo sustentado en la participación del poder popular; y aún cuando no entendemos cual es el poder popular, revisamos las acciones que insertan en las soluciones, de las que asumimos el rol de apoyo aceptante.

Manifiesta a Maduro, que, como parte de las propuestas, se veía la necesidad de hacer cambios fundamentales en política económica, pero también la necesidad de llegar a acuerdos políticos para rescatar al país y evitar el desastre. Igualmente le manifiesta, que ha sido llamado a reuniones con algunos líderes de oposición, del sector privado y líderes intelectuales y sensores de opinión, como el maestro Pompeyo Márquez, Antonio Ledezma y Chúo Torrealba, Jorge Roig, Luis Vicente León, entre otros; testificándole, como importante de esas reuniones, “…que un golpe de estado era posible entre las opciones que veía venir. Por la sencilla razón de que tu gobierno había perdido el liderazgo, la representatividad, la gobernabilidad, y la legitimidad en grado muy importante. El descontento con la situación económica y social es tal, que más del 70% de la población quiere un cambio de gobierno ya”.

Obviamente, lo expresado es discutible, sin embargo, se dirige a los militares: “A los soldados de venezolanos”, donde equiparándose al rango genérico, expone el meollo de su idea, que a nuestro entender, clarifica la situación al sector militar, para abrirle los ojos sobre lo que muchos no quieren entender. Dice: “…Para ver qué país, y qué gente es a la que defendemos con nuestras armas, veamos muy brevemente, en un lenguaje llano y resumido, cuáles son los problemas económicos y cómo se resuelven. No hace falta entrar en el detalle de todas las cifras para darse cuenta de que el diagnóstico es de un país cercano a la muerte, en un sentido muy real: escasez de comida y medicinas, insumos, repuestos, etc, con una contracción económica que puede rondar del 15% al 20% a finales del año. Inflación galopante, que puede llegar entre 700% y 1000%…” “…El cuento es que me considero un soldado, como ustedes. Y en ese sentido estamos hermanados, de hecho, con todos los hombres y mujeres venezolanos. Seguimos una misión aquí. Cada quien en su posición concreta, sirviendo un propósito. En el caso de ustedes, defensa de la soberanía de la nación por la vía de las armas físicas, sabiendo que esa soberanía se extiende, y depende de, la soberanía política, económica y social. En el caso mío, que estoy seguro es el caso de ustedes también, mi función es la defensa del país, y de la humanidad y la naturaleza toda, con las armas de la Verdad, la Justicia, la Paz interior, la tolerancia, la democracia. Y los enemigos son, es bueno dejarlo explícito, la mentira, la manipulación, la injusticia, la explotación, la segregación, la exclusión y la esclavización humana y de la naturaleza. En el caso de ustedes y el mío, somos también seguidores de Simón Bolívar, quien vino a liberar y defender naciones y pueblos, no a someterlos, esclavizarlos, a conquistarlos y usufructuar su trabajo y su territorio; todo mediante la prédica de principios de moral y de luces en todos sus discursos, y sobre todo con sus acciones…”

Sinceramente, invito a todos los militares, especialmente a los que planificar y ejercen mando, para coadyuvar con los políticos a salvar el país. No hay, ni guerra económica ni invasión del imperio.

@Enriqueprietos

ARTÍCULO EN REFERENCIA:

A los soldados venezolanos. Por: Felipe Pérez Martí.